A dos semanas de comenzado el 2006, Dakar (Senegal) acogió un taller educativo que reunió especialistas de TIC (Tecnologías de la Información y la Comunicación) y periodistas de cinco países francófonos de África Central y Occidental. Fue organizado en concierto con Panos West Africa (PIWA), un grupo basado en Senegal, muy activo en asuntos de politicas de TIC -como se puede observar en proyectos como el sito web CIPACO (www.cipaco.org).
Lo que le proporcionó a la conferencia un ambiente particularmente interesante fue el equilibrio de género entre los asistentes invitados como ponentes o participantes y la manera en la que los organizadores fueron capaces de mantener la problemática de género en el punto de mira de las políticas de Acceso Universal a las Telecomunicaciones.
Cuando la gente habla del acceso universal, implícitamente se supone que se incluye en forma automática a la mujer como receptora de dicho servicio. Pese a esto, la especial naturaleza de los factores que impiden que la mujer acceda a la tecnología no suelen tratarse. Esto logró evitarse en Dakar enfatizando la participación de la mujer y su acceso y uso de las tecnologías de información y comunicación.
Los participantes asistieron a varias presentaciones sobre la universalidad del acceso a servicios de telecomunicaciones dentro del contexto africano, a una presentación sobre el análisis de género y a otra sobre el papel de los profesionales de las telecomunicaciones en el éxito del acceso universal. Fue Marie Hélène Mottin-Sylla (ENDA-Regentic)1 quien estableció el vínculo entre todos estos temas con su presentación titulada “Teniendo en cuenta la problemática de género en la política de servicio universal: Apoyando elementos y avances ligados a la Cumbre Mundia sobre la Sociedad de la Información.”1 ENDA (Medio Ambiente y Desarrollo por su sigla en francés) es una organización miembro de APC; Regentic (Red Género y TIC) es una red en la que participa esta asociación.
Los resultados obtenidos por los treinta participantes profesionales de la comunicación de Benin, Senegal, Níger, Burkina Faso, Guinea Ecuatorial, Costa de Marfil y Chad demostraron que en todos estos países existían grandes similitudes respecto a la falta de regulaciones y políticas de TIC, particularmente en lo referente a la problemática de género así como a las disposiciones para el servicio universal. Los participantes informaron que, a menudo, lo poco que existía en términos de políticas de TIC estaba más al servicio del sector corporativo y los intereses empresariales que a la necesidad de lograr un desarrollo sostenible de la ciudadanía.
Se acordó que debe reactivarse la creación de políticas de TIC en África Occidental, y que ésta debe exigir tanto avances tecnológicos como un nuevo impulso en la creación de políticas de acceso universal. El objetivo es ayudar a las personas a conocer sus derechos como ciudadanos, especialmente en el caso de sectores marginados como la población rural y las mujeres.
Durante la conferencia, profesionales de la comunicación aprendieron como podían contribuir a estimular la emergencia de nuevas políticas de TIC. Es posible que algunos presionen a sus gobiernos, otros sencillamente plantearán las posibilidades para el acceso universal de un modo más amplio. No obstante, no cabe duda de que el papel de los periodistas y publicistas es importante a la hora de lograr nuevas políticas de TIC y acceso universal.
“Es asombroso ver cómo el progreso en términos de acceso universal se quedan muy por detrás de los avances de la infraestructura técnica y los servicios privados”, comentó Marie-Hélène Mottin-Sylla. “La definición del servicio universal no se ha actualizado desde el 2001”, declaró. “Se refiere únicamente al acceso a telefonía fija sin tener en cuenta los avances tecnológicos (Internet, conexión inalámbrica) que podrían promover el desarrollo de la mayor parte de África”, añadió.
Una cosa está clara, y es que el 2006 empieza con fuerza en Dakar. Mantener y diseminar esta energía y este compromiso con el acceso, en particular con el acceso de la mujer, es el reto que se nos presenta a todos según avanza el año.
Aunque reconoció el éxito del taller, Mottin-Sylla apuntó a los esfuerzos invertidos en el servicio de acceso universal. “Son marginales en comparación con lo que se invierte en el desarrollo industrial y del sector privado; asimismo nos recuerdan el desequilibrio causado por los ajustes estructurales”.
