Durante la sesión temática “Internet como generador de oportunidades para nuestras economías” llevada a cabo en la Reunión preparatoria de América Latina y el Caribe para el Foro de gobernanza de internet, Carlos Afonso del Instituto Nupef y CGI.br expuso una interesante presentación, compartiendo la mesa con Rodrigo Gallegos (academia), Shernon Osepa (Internet Society), Ignacio Caride (Mercado Libre) y Silvia Bidart (ALETI).
Presentación por Carlos Afonso de Instituto Nupef y CGI.br en el panel “Internet como generador de oportunidades para nuestras economías” en el 8° LAC FGI
“We reside in a physical world, but live an increasingly digital life. Trips to the libray, music store, bank teller, travel agent, and even government offices are gradually becoming a distant memory, replaced by their digital incarnations. People are finding love and countries are waging (cyber) war on the internet […] Behind these activities is an explosion of digital activities: 6,000 tweets each second, 100 hours of video uploaded on YouTube each minute, 240 million Google searches each hour, 106 billion emails sent each day.2 The digital revolution has changed the daily lives of billions of people, though billions more have yet to go fully online.” — Concept Note to the World Development Report 2016, World Bank.
Algunos conceptos y observaciones sobre el tema de esta sesión:
1. El sumario ejecutivo del último relatorio de la OECD (Information Economy Report 2015) empieza con la siguiente frase: “The Internet community is developing a proposal to transition oversight of the Internet’s technical resources from the United States government to the global multistakeholder community.” Mismo con ese entendimiento inadecuado del alcance de la transición IANA (domínios, números y protocolos son solo una parte del amplio espectro de “recursos técnicos” de Internet o relacionados a Internet), el relatorio trae puntos relevantes que merecen consideración también para nuestra región.
2. ¿Que es la “inclusive and global digital economy” mencionada en el relatorio de OECD? Mi visión es que la economía digital idealmente es una característica de la vida económica de una sociedad en que la actividad económica en su totalidad es mediada por sistemas digitales en red. Tenemos hoy más o menos avances en esa dirección, en la medida que más y más procesos, transacciones, comunicaciones son instrumentadas por sistemas digitales en red. Esta evolución puede involucrar disrupciones sociales (desempleo, desigualdades en la calificación o en recursos para participar de la misma) que son tópicos esenciales en el desarrollo de políticas públicas en lo que podríamos llamar de transición hacia la economía digital en un contexto de desarrollo humano sostenible.
3. OECD reconoce la importancia de una infraestructura que optimize la implantación de redes de fibra óptica conectando de forma redundante todos los núcleos urbanos como base esencial para la oferta amplia de banda ancha vía varias formas de conexión alámbrica o inalámbrica local. De hecho servicios “wireless” no pueden ser efectivos como acceso en banda ancha sin un “backhaul” a las espinas dorsales que sea a prueba de futuro (como lo es la fibra óptica).
4. Nuevas tecnologías de compresión y modulación en la banda ancha fija permiten el uso de pares de cable de teléfono tradicionales para el acceso local a velocidades en el rango de los Gbit/s. Eso puede dar nueva vida a una infraestructura fija que se considera en extinción o con valor económico irrelevante, potenciando la oferta de banda ancha a los domicilios, con implantación a relativo bajo costo (por la existencia misma de los cables telefónicos). Inglaterra es un ejemplo concreto del uso de esas nuevas técnicas y puede ser una referencia para las políticas públicas de banda ancha en otros países.
5. Por otra parte, el hecho de que hay más de un celular por cada habitante en algunos países no representa de ningún modo la conquista de la universalización del acceso, al contrario de lo que nos hacen pensar los anuncios de las telefónicas. La gran mayoría tiene la posibilidad de conexión móvil a internet, pero la calidad de la conexión, las limitaciones contractuales y el precio a pagar hacen inalcanzable una experiencia de uso compatible con los tipos de servicios ofertados hoy en la red. Entonces esa gran mayoría no está efectivamente incluida solo por el hecho de tener un teléfono móvil con un chip habilitado para navegar en la red.
6. Restricciones o planes de negocios muchas veces impuestos por las grandes operadoras de banda ancha o grandes empresas de servicios de valor adicionado pueden limitar o impedir la innovación sin amarras (“permissionless innovation”). Nuevas ideas de aplicaciones pueden ser impedidas de florecer por esos acuerdos que imponen “jardines murados” a sus usuarios.
7. El uso o no de ciertas facilidades en la red hoy por parte de emprendedores no necesariamente representa una medida adecuada de la evolución de la economía digital. Como ejemplo, el hecho de que una empresa no use un servicio de nube por razones de seguridad o efectividad de acceso, y puede tener los recursos técnicos para mantener sus propios servicios de almacenaje o aplicativos en red (y este no es solo el caso de empresas mayores), no la torna menos incluida en la economía digital si comparada a una que mantiene todos sus datos y aplicativos “off-site”. Este ejemplo es especialmente sensible en un escenario de imposición de acceso a datos de servicios de nube por parte de agencias de vigilancia de los gobiernos o de violaciones de privacidad por parte de las operadoras de esos servicios.
8. innovaciones seguirán ocurriendo que quiebran estándares tradicionales de ciertas actividades productivas, lo que requiere un proceso compatible de evolución de regulaciones y legislación, a par de iniciativas de cambio en las formas de negocio. Como ejemplos, servicios tradicionales de taxi versus Uber, que tiene similaridades con la ruptura de un perfil de negocio de las distribuidoras tradicionales de medios con la introducción de los medios online en sus varias formas, o mismo la ruptura de la prensa tradicional con la información online. La participación multisectorial efectiva en la formación de esas políticas es crucial para su legitimidad y aceptación frente a las rupturas.
9. Mecanismos de estímulo a la innovación (como las experiencias muy exitosas de aceleradoras de ideas innovadoras en países avanzados) son esenciales y urgentes, y requieren de un apoyo efectivo de gobiernos, academia y sector privado, además del sistemático intercambio de ideas y experiencias entre los países. Estos mecanismos deben considerar especialmente a los jóvenes, abriendo oportunidades especiales o prioritarias a jóvenes de bajos ingresos. Importante en este tópico el intercambio de mejores prácticas entre los países.
10. La extrema fragilidad de la red frente a invasiones, ataques, fraudes y monitoreo por parte de agentes privados y públicos requiere avances significativos en la protección del usuario y de las estructuras transaccionales de la economía digital. La situación hoy es de fragilidad tal que una de las empresas de punta en software de vigilancia ha sido ella misma víctima de una penetración devastadora, que además reveló el alcance preocupante del uso de esos softwares por gobiernos autoritarios o no, empresas y otros agentes para captura no autorizada de datos de usuarios.
11. Los servicios y técnicas de criptografía son esenciales para contrarrestar las vulnerabilidades de seguridad en la red. La emisión y renovación de certificados está a cargo del mercado de certificación, a costos muchas veces inalcanzables para una pequeña organización o empresa. Por otro lado, garantizar que todas las conexiones a servicios Web sean criptografiados es esencial para mitigar o minimizar violaciones. Hay iniciativas de alcance internacional para aportar certificados sin costo para el usuario que merecen ser consideradas.
12. Por último y no menos importante, hay que considerar la evolución de tecnologías de radio digital para diseminar conectividad en los bordes de la red. Como consecuencia, la relevancia de la participación pluralista en la elaboración de normas, regulación y legislación sobre uso y distribución/asignación del espectro (un patrimonio de la comunidad) es crucial. El desarrollo reciente de tecnologías de radio cognitivo y la reasignación de banda de la TV analógica en la transición a la TV digital abren oportunidades significativas (para gobiernos y emprendedores locales, iniciativas comunitarias etc) para servicios locales, para prácticas innovadoras en servicios de red. [Este tema específico será objeto de una mesa redonda en el próximo FGI en Brasil.]
Fuente original: Instituto Nupef .