Esta publicación proporciona una reflexión sobre las complejas situaciones en que se encuentran las mujeres defensoras que enfrentan amenazas y violaciones debido a su trabajo en defensa de los derechos humanos.
La investigación, sustenta que tanto la violencia que experimentan las defensoras como el impacto que tienen estas agresiones en sus vidas y activismo, hace necesaria la adopción de medidas de protección que aborden las distintas necesidades y realidades de las defensoras. Asimismo, propone avanzar hacia un concepto de protección integral que va más allá de la protección física y se enfoca en la creación de un ambiente propicio para que las defensoras puedan realizar su trabajo en condiciones de seguridad.
Las ideas y recomendaciones incluidas en esta publicación fueron desarrolladas mediante un proceso de consulta que recoge las experiencias de mujeres defensoras de diferentes regiones.